La tarima flotante es una parte fundamental de la casa. Pero además de ser algo fundamental en el hogar y realmente funcional, no debemos olvidar que ahora hay muchas opciones en el mercado, por lo que puede convertirse en un elemento que luzca a nivel estético.

Lo que está claro es que, tanto si estás pensando en elegir una o si deseas cambiar la que tienes, debes tomarte tu tiempo para poder escoger la mejor opción. Si tienes alguna duda, seguro que lo mejor es que puedas disponer del consejo de profesionales especializados en el sector. En Acron Tarimas e Instalaciones seguro que pueden echarte una mano. Son especialistas en instalar tarima flotante en Madrid, así que tendrás la que desees con plenas garantías. Estás muy cerca de encontrar en tu vivienda la comodidad que siempre has querido. Dicho esto, ¿sabes cómo cuidar tu tarima flotante? Aquí te dejamos algunos consejos. 

¿Quieres conocer cómo cuidar tu tarima flotante?

Descálzate:

A la hora de saber cómo cuidar tu tarima flotante, esto es algo clave. ¿Por qué? Porque cuando uno viene de la calle, lo normal es que traiga bastante suciedad en el calzado. Por tanto, lo mejor es quitarlo antes de entrar en la vivienda y poner zapatillas que solo se usan en casa y de las que ningún residuo se pegará en la tarima. Otra opción es ir descalzo en casa, pero debes tener en cuenta que, en ocasiones, puede convertirse en una práctica bastante peligrosa, ya que pueden aparecer los inoportunos resbalones y, por tanto, los golpes y las lesiones. Si por cualquier cosa tienes que estar calzado, sería interesante evitar los tacones y las suelas con tacos, ya que ambos incidirán con gran impacto sobre el parqué. 

Cuidado con muebles y juguetes:

Si tienes niños en casa, es normal que tengan que disfrutar del tiempo en el hogar jugando y, para eso, son necesarios los juguetes. Pues bien, hay que intentar que estos sean lo menos dañinos para la tarina, produciendo pocos roces o un desgaste innecesario que termina por romperla o levantarla. Por otro lado, si mueves muebles, es fundamental que lo hagas con mucho cuidado y poniendo una protección para que el arrastre no se produzca directamente sobre la tarima. Como ves, cada detalle cuenta y está en tu mano valorar todos ellos. 

Vigila humedad y calor extremo:

La humedad es una gran enemiga de la tarima. Puede causar graves daños en la misma, pero no solo eso, sino que puede afectar a otras partes de la casa, causando problemas de salud a los habitantes de la misma. En cuanto al calor excesivo, ya sabes que dilata la madera y eso hará que la tarima se resienta de forma contundente. Por eso, controlar algunos factores como estos en el hogar puede ayudar mucho. 

Nada de productos específicos:

Algunos de ellos pueden resultar muy abrasivos, desgastando el material de la tarima y haciendo que la misma cambie de aspecto. Por eso, la mejor alternativa es limpiar como siempre lo has hecho al fregar el suelo. Antes de eso, barre con una escoba. 

¿Ya sabes cómo cuidar tu tarima flotante? ¡Manténla en perfecto estado!