Optimizar tus tareas y tener más tiempo para ti es posible al renovar tu espacio de trabajo. Pero, ¿cómo se consigue esto? Te lo explicamos.

Si has llegado hasta aquí buscando reformas de interiores en Barcelona, estás en el lugar adecuado. En este artículo vamos a darte las claves para renovar el espacio en el que pasas muchas horas de tu día: tu espacio de trabajo. ¿Quieres saber cómo? Toma nota.

Así puedes renovar tu espacio de trabajo

Desde que la pandemia nos obligó a trabajar en casa, son muchas las personas que han visto mejorar su vida y su productividad.

Esto nos ha llevado a concebir espacios de trabajo más amables, espacios que invitan a desempeñar nuestro puesto con más ganas.

Tanto en casa como en la oficina, que estos espacios estén diseñados para el confort y la productividad es crucial. Elegir una buena silla de oficina es tan importante como contar con un buen colchón o un buen sofá.

Claves para conseguirlo

Hay varios aspectos en los que debes fijarte a la hora de renovar un espacio de trabajo. Debemos recordar que todos ellos son importantes. En muchas ocasiones creemos que la decoración o los colores son menos importantes que la silla en la que pasamos tantas horas, pero no es cierto.

Todos los elementos que forman parte de un espacio influyen en nuestro estado de ánimo y contribuyen a nuestro bienestar, el cual es crucial para desempeñar correctamente nuestro trabajo.

Te recomendamos por lo tanto que, tanto si se trata de reformas de oficinas en Barcelona, como si tan solo vas a realizar pequeños cambios que no requieren obras, tengas en cuenta los siguientes aspectos:

1. Analiza las necesidades: no podemos cambiar un espacio de trabajo del que no sabemos qué falla y qué funciona. Haz una encuesta a tus trabajadores, recurre a la ayuda de expertos, analiza cómo te sientes tú. La tendencia actual se fija más en proporcionar soluciones a quienes van a ocupar el espacio que en el diseño estético.
2. Mobiliario: hace años, los muebles de trabajo cumplían su función sin ir más allá. Ahora, el mobiliario de oficina está pensado y diseñado para favorecer la ergonomía y cuidar de nuestra salud. Además disponemos de accesorios y herramientas para adaptar el espacio a cada persona, pues no todos tenemos las mismas necesidades.
3. Economiza el espacio: esto significa que, una vez hayamos identificado los puntos débiles del espacio, podremos dividir el espacio de una manera más adecuada. Si disponemos de una sala de juntas en la que nunca nos reunimos, o de una recepción en la que no recibimos clientes, ¿por qué no darles otra vida a esas estancias? Quizá podamos crear un espacio de descanso para los trabajadores o un pequeño comedor.
4. Permite la movilidad: estudia los metros disponibles de manera que faciliten la movilidad por el espacio. Cuando trabajamos en una misma postura, es muy importante realizar pequeños descansos, mover el cuerpo y cambiar de posición. Asegúrate de que el personal pueda caminar entre las mesas con facilidad.
5. Organiza la tecnología: si todos trabajamos con ordenadores que precisan de mucho cableado, es muy importante que los puestos de trabajo dispongan de los enchufes y la ergonomía necesarios. Aquí entra en juego la prevención de riesgos, especialmente en el caso de los elevadores de pantalla, la sujeción adecuada de los cables o la correcta colocación de cada elemento en el espacio.
6. Si no dispones de un rincón al aire libre, créalo dentro de la oficina. Es muy importante rodearnos de naturaleza, respirar aire puro y estar en contacto con flora y fauna. Como no todas las oficinas disponen de espacio exterior, siempre se puede crear una zona con plantas y luz natural.

¿Qué te han parecido estas claves para renovar el espacio de trabajo? Ahora ya sabes por dónde empezar a introducir estos cambios. El bienestar y la productividad no tienen por qué estar reñidos, al contrario, deben ir siempre de la mano y esta es la mejor forma de conseguirlo.